El arte no es sólo belleza, es también un arma que denuncia desigualdades e injusticias. El arte activista tiene el poder de despertar a la gente, es el catalizador que indica el cambio significativo que queremos experimentar.
Hoy en Moneytrans, en vísperas del Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo, queremos escribir un artículo que visibilice y celebre la diversidad cultural y la integración. Por esta razón, hemos optado por presentar a algunos artistas a los que apoyamos especialmente.
Algunos de los más grandes artistas activistas contemporáneos se han asociado con la fundación Amplifier, » una máquina de arte para el cambio social».
Esta organización sin ánimo de lucro se dedica a reimaginar y amplificar las voces de movimientos populares a través del arte y el compromiso de la comunidad. Con este fin, Amplifier Foundation financia colaboraciones entre estos movimientos y artistas contemporáneos para que sus mensajes puedan llegar a un público más amplio. Su objetivo es transformar artistas en activistas y observadores en participantes.
El artista Shepard Fairey, junto con Ernesto Yerena y Jessica Sabogal, son algunos de los artistas que actualmente colaboran con Amplifier y que creen que el arte activista tiene el poder de despertar a la gente.
¿Quiénes son?
Shepard Fairey es uno de los artistas callejeros más consagrados del mundo. Un artista de serigrafía, muralista e ilustrador, fue conocido por primera vez por su campaña de pegatinas «Andre The Giant has a Posse» mientras estaba en la Escuela de Diseño de Rhode Island. Más tarde, se haría un nombre en las elecciones presidenciales de 2008 con su cartel de «Hope» de Barak Obama. Su trabajo tiene como objetivo concienciar sobre asuntos sociales como la igualdad y la inmigración.
Realmente se trata de asegurarse de que la gente recuerde que We The People significa todo el mundo, engloba a todas las personas. Creo que las campañas fueron muy divisivas, más de un lado que del otro. Pero solo se trata de recordarle a la gente que debe encontrar su humanidad común, y mirar más allá de tal vez una definición escueta de lo que significa ser estadounidense.
Ernesto Yerena es un artista que vive en Los Ángeles. Su arte pone de manifiesto las preocupaciones políticas con asuntos que representan iconos culturales, rebeldes y gente común que expresa su posición en contra de la opresión. Aunque Yerena se identifica como chicano, también se identifica fuertemente como indígena, algo que se ha visto reflejado a menudo en su trabajo. Conocida por su activismo, Yerena es la fundadora y curadora de la campaña de arte ‘Alto Arizona’ y miembro fundador de la campaña ‘We Are Human’.
Creo obras de arte para que la gente de la clase trabajadora, la gente de color de la clase trabajadora y todos los demás puedan tener una obra de arte en sus hogares y puedan relacionarse con ellas, que sus hijos puedan crecer con ellas. Son imágenes que empoderan. Imágenes que celebran la cultura. Imágenes que están haciendo que se conviertan en pesandores más críticos
Jessica Sabogal es una muralista colombiana de la primera generación. Su arte es un refugio, un tributo, una salida creativa de adoración y exaltación para mujeres con historias a menudo incomprendidas. Sus obras tienen una visión de la identidad femenina que es revolucionaria y poderosa, valiente y bella. Más recientemente, ha creado una campaña visual llamada ‘Women are perfect’ que intenta difundir esta noción tan simple pero necesaria por todo el mundo.
El arte es una manera fácil para que la gente muestre cómo se siente simplemente publicando imágenes en Internet o en las ventanas de sus casas, así que te animo a que si te identificas con alguno de mis carteles, por favor compártelos. Por favor, hazlos visibles.
Su trabajo ha apoyado proyectos de reforma de la justicia penal y campañas ambientales en colaboración con grupos indígenas.¡Así que APOYÉMOSLOS!